Nos reunimos en Ávila alrededor de 80 catequistas de la Región del Duero, y de la diócesis de Valladolid participamos 14. Durante dos días estuvimos profundizando la dinámica (método, pedagogía y teología) de "Los oratorios de niños". Una técnica llevada a cabo, desde sus comienzos, por los escolapios y hoy extendida por colegios y parroquias.

Los catequistas hemos visto y podido comprobar que es posible y necesario iniciar a los niños a la oración en la catequesis: ayudarles a entrar en intimidad con Jesús. Los niños son tremendamente receptivos al encuentro con el Señor. Será cuestión de saberlos llevar con palabras de amor, desde el silencio, la Palabra de Dios y la caridad, con tacto, afecto, los símbolos, etc.,... teniendo respeto por el ambiente que los rodea, las características que los envuelven (familiares, personales, psicológicas, de relación,...) y tomándoles de la mano para ponerlos a los pies de Jesús, el Señor.

A la hora de comenzar la práctica del Oratorio puede que algunos catequistas... se echen "para atrás" por no sentirse preparados. Son los temores lógicos del que está comenzando algo nuevo. No obstante, creemos que, con un poco de tiempo y práctica muchos pueden hacerse "grandes animadores" de oratorios, pues el método es sencillo y muy mecánico. Además... la mayor parte... se la tenemos que dejar a Dios.... ¿o no?

En la delegación de catequesis se puede ofrecer material, información, en el que se explica paso a paso el "esquema estándar" de un oratorio, incluyendo distintas posibilidades en algunos de los puntos. Se pueden ver para poder llevar a tu grupo de catequistas para leerlo y ponerse manos a la obra. Además, con el tiempo, con la experiencia, vosotros mismos iréis enriqueciendo vuestros oratorios e incorporándoles elementos que veáis más oportunos y provechosos.