9.marzo.2014__ La parroquia de San Andrés acogió el encuentro cuaresmal de jóvenes organizado por la Delegación de Pastoral Juvenil de la Diócesis.

Fue un buen impulso para correr con alegría el camino hacia la Pascua. Una “cita” con Jesús en el pozo de la Samaritana.

Primero, se invitó a redescubrir el manantial que cada uno tiene en su interior. A descubrir que nuestra inmensa capacidad de amor y vida, no se sacia con poquito amor ni con cualquier vida.

Se vió también la importancia de que el cántaro de nuestra vida no esté taponado ni roto para no despilfarrar nuestra capacidad de amar.

El segundo momento fue encontrarse con Jesús y experimentar cada uno como su Agua Viva sacia de nuevo nuestro corazón joven.

Después, nos pasó como a la Samaritana: de nuestro manantial brotaban palabras de vida. Nos contamos estas palabras, primero entre nosotros, y nos animamos a decirlas en las calles de nuestros pueblos.

Al final, nos llevamos nuestros cántaros, conscientes de que tendremos más “citas” con Jesús en esta Cuaresma. Porque si hablamos con Él en el camino, seremos sus testigos allí donde vayamos.